68+Versículos de la Biblia Llanto

“Jesús le dice: Yo soy el camino, la verdad, la vida: nadie viene al Padre, sino por mí”

— Juan 14:6

“Por manera que si un miembro padece, todos los miembros á una se duelen; si un miembro es honrado, todos los miembros á una se gozan”

— 1 Corintios 12:26

“No temas, que yo soy contigo; no desmayes, que yo soy tu Dios que te esfuerzo: siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”

— Isaías 41:10

“Limpiará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; la muerte no será más; no habrá más llanto, ni clamor, ni dolor: porque las primeras cosas son pasadas”

— Apocalipsis 21:4

“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado á su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”

— Juan 3:16

“Mis huídas has tú contado: Pon mis lágrimas en tu redoma: ¿No están ellas en tu libro?”

— Salmos 56:8

“Que si confesares con tu boca al Señor Jesús, creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo”

— Romanos 10:9

“Tiempo de amar, tiempo de aborrecer; tiempo de guerra, tiempo de paz”

— Eclesiastés 3:8

“Lloró Jesús”

— Juan 11:35

“Como el Señor la vió, compadecióse de ella, le dice: No llores”

— Lucas 7:13

“Empero María estaba fuera llorando junto al sepulcro: estando llorando, bajóse á mirar el sepulcro”

— Juan 20:11

“Sirviendo al Señor con toda humildad, con muchas lágrimas, tentaciones que me han venido por las asechanzas de los Judíos”

— Hechos 20:19

“El que vivo, he sido muerto; he aquí que vivo por siglos de siglos, Amén. tengo las llaves del infierno de la muerte”

— Apocalipsis 1:18

“Jesús entonces, como la vió llorando, á los Judíos que habían venido juntamente con ella llorando, se conmovió en espíritu, turbóse”

— Juan 11:33

“Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, no de mal, para daros el fin que esperáis”

— Jeremías 29:11

“La cual obró en Cristo, resucitándole de los muertos, colocándole á su diestra en los cielos”

— Efesios 1:20

“De la manera que está establecido á los hombres que mueran una vez, después el juicio”

— Hebreos 9:27

“Invócame en el día de la angustia: Te libraré, tú me honrarás”

— Salmos 50:15

“Estas cosas os he hablado, para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción: mas confiad, yo he vencido al mundo”

— Juan 16:33

“Empero sin fe es imposible agradar á Dios; porque es menester que el que á Dios se allega, crea que le hay, que es galardonador de los que le buscan”

— Hebreos 11:6

“En amor no hay temor; mas el perfecto amor echa fuera el temor: porque el temor tiene pena. De donde el que teme, no está perfecto en el amor”

— 1 Juan 4:18

“También Isaías clama tocante á Israel: Si fuere el número de los hijos de Israel como la arena de la mar, las reliquias serán salvas”

— Romanos 9:27

“Varones hermanos, se os puede libremente decir del patriarca David, que murió, fué sepultado, su sepulcro está con nosotros hasta del día de hoy”

— Hechos 2:29

“Porque así como en Adam todos mueren, así también en Cristo todos serán vivificados”

— 1 Corintios 15:22

“Amarás pues al Señor tu Dios de todo tu corazón, de toda tu alma, de toda tu mente, de todas tus fuerzas; este es el principal mandamiento”

— Marcos 12:30

“Mas á los temerosos é incrédulos, á los abominables homicidas, á los fornicarios hechiceros, á los idólatras, á todos los mentirosos, su parte será en el lago ardiendo con fuego azufre, que es la muerte segunda”

— Apocalipsis 21:8

“Porque á los que antes conoció, también predestinó para que fuesen hechos conformes á la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos”

— Romanos 8:29

“Mas los que esperan á Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán las alas como águilas, correrán, no se cansarán, caminarán, no se fatigarán”

— Isaías 40:31

“Porque lo que era imposible á la ley, por cuanto era débil por la carne, Dios enviando á su Hijo en semejanza de carne de pecado, á causa del pecado, condenó al pecado en la carne”

— Romanos 8:3

“Porque también Cristo padeció una vez por los injustos, para llevarnos á Dios, siendo á la verdad muerto en la carne, pero vivificado en espíritu”

— 1 Pedro 3:18

“Esforzaos cobrad ánimo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos: que Jehová tu Dios es el que va contigo: no te dejará ni te desamparará”

— Deuteronomio 31:6

“El segundo es semejante á él: Amarás á tu prójimo como á ti mismo. No hay otro mandamiento mayor que éstos”

— Marcos 12:31

“Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado; el principado sobre su hombro: llamaráse su nombre Admirable, Consejero, Dios fuerte, Padre eterno, Príncipe de paz”

— Isaías 9:6

“ES pues la fe la sustancia de las cosas que se esperan, la demostración de las cosas que no se ven”

— Hebreos 11:1

“El séptimo ángel tocó la trompeta, fueron hechas grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido á ser los reinos de nuestro Señor, de su Cristo: reinará para siempre jamás”

— Apocalipsis 11:15

“Entonces Jesús, clamando á gran voz, dijo: Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu. habiendo dicho esto, espiró”

— Lucas 23:46

“AMADOS, no creáis á todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas son salidos en el mundo”

— 1 Juan 4:1

“He aquí, yo soy contigo, te guardaré por donde quiera que fueres, te volveré á esta tierra; porque no te dejaré hasta tanto que haya hecho lo que te he dicho”

— Génesis 28:15

“Tiempo de llorar, tiempo de reir; tiempo de endechar, tiempo de bailar”

— Eclesiastés 3:4

“Oye mi oración, oh Jehová, escucha mi clamor: No calles á mis lágrimas; Porque peregrino soy para contigo, advenedizo, como todos mis padres”

— Salmos 39:12

“Todos los que moran en la tierra le adoraron, cuyos nombres no están escritos en el libro de la vida del Cordero, el cual fué muerto desde el principio del mundo”

— Apocalipsis 13:8

“Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, gente santa, pueblo adquirido, para que anunciéis las virtudes de aquel que os ha llamado de las tinieblas á su luz admirable”

— 1 Pedro 2:9

“Él le dijo: ¿Qué has hecho? La voz de la sangre de tu hermano clama á mí desde la tierra”

— Génesis 4:10

“Como llegó cerca viendo la ciudad, lloró sobre ella”

— Lucas 19:41

“Porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo”

— Romanos 10:13

“Abriéronse los sepulcros, muchos cuerpos de santos que habían dormido, se levantaron”

— Mateo 27:52

“El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice á las iglesias. Al que venciere, daré á comer del árbol de la vida, el cual está en medio del paraíso de Dios”

— Apocalipsis 2:7

“Jesús decía: Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen. partiendo sus vestidos, echaron suertes”

— Lucas 23:34

“Esta otra vez haréis cubrir el altar de Jehová de lágrimas, de llanto, de clamor; así que no miraré más á presente, para aceptarlo con gusto de vuestra mano”

— Malaquías 2:13

“Ve, di á Ezechîas: Jehová Dios de David tu padre dice así: Tu oración he oído, visto tus lágrimas: he aquí que yo añado á tus días quince años”

— Isaías 38:5

“Este también beberá del vino de la ira de Dios, el cual está echado puro en el cáliz de su ira; será atormentado con fuego azufre delante de los santos ángeles, delante del Cordero”

— Apocalipsis 14:10

“LA revelación de Jesucristo, que Dios le dió, para manifestar á sus siervos las cosas que deben suceder presto; la declaró, enviándo la por su ángel á Juan su siervo”

— Apocalipsis 1:1

“Porque no habéis recibido el espíritu de servidumbre para estar otra vez en temor; mas habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos, Abba, Padre”

— Romanos 8:15

“Otro ángel salió del templo, clamando en alta voz al que estaba sentado sobre la nube: Mete tu hoz, siega; porque la hora de segar te es venida, porque la mies de la tierra está madura”

— Apocalipsis 14:15

“Porque somos hechura suya, criados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó para que anduviésemos en ellas”

— Efesios 2:10

“Dícele Jesús: No me toques: porque aun no he subido á mi Padre: mas ve á mis hermanos, diles: Subo á mi Padre á vuestro Padre, á mi Dios á vuestro Dios”

— Juan 20:17

“Respondió Jesús: Mi reino no es de este mundo: si de este mundo fuera mi reino, mis servidores pelearían para que yo no fuera entregado á los Judíos: ahora, pues, mi reino no es de aquí”

— Juan 18:36

“Ellos pelearán contra el Cordero, el Cordero los vencerá, porque es el Señor de los señores, el Rey de los reyes: los que están con él son llamados, elegidos, fieles”

— Apocalipsis 17:14

“Vosotros de vuestro padre el diablo sois, los deseos de vuestro padre queréis cumplir. Él, homicida ha sido desde el principio, no permaneció en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, padre de mentira”

— Juan 8:44

“Mas él herido fué por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados: el castigo de nuestra paz sobre él; por su llaga fuimos nosotros curados”

— Isaías 53:5

“Los ojos de Jehová están sobre los justos, atentos sus oídos al clamor de ellos”

— Salmos 34:15

“El cual en los días de su carne, ofreciendo ruegos súplicas con gran clamor lágrimas al que le podía librar de la muerte, fué oído por su reverencial miedo”

— Hebreos 5:7

“He aquí, os digo un misterio: Todos ciertamente no dormiremos, mas todos seremos transformados”

— 1 Corintios 15:51

“En mi angustia invoqué á Jehová, clamé á mi Dios: El oyó mi voz desde su templo, mi clamor llegó delante de él, á sus oídos”

— Salmos 18:6

“El cual mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros siendo muertos á los pecados, vivamos á la justicia: por la herida del cual habéis sido sanados”

— 1 Pedro 2:24

“Confesaos vuestras faltas unos á otros, rogad los unos por los otros, para que seáis sanos; la oración del justo, obrando eficazmente, puede mucho”

— Santiago 5:16

“El postrer enemigo que será deshecho, será la muerte”

— 1 Corintios 15:26

“Luego nosotros, los que vivimos, los que quedamos, juntamente con ellos seremos arrebatados en las nubes á recibir al Señor en el aire, así estaremos siempre con el Señor”

— 1 Tesalonicenses 4:17

“Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual, sin engaño, para que por ella crezcáis en salud”

— 1 Pedro 2:2