81+Versículos de la Biblia Dos piedras

“Mas yo también te digo, que tú eres Pedro, sobre esta piedra edificaré mi iglesia; las puertas del infierno no prevalecerán contra ella”

— Mateo 16:18

“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado á su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”

— Juan 3:16

“Vosotros también, como piedras vivas, sed edificados una casa espitirual, un sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales, agradables á Dios por Jesucristo”

— 1 Pedro 2:5

“El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice á las iglesias. Al que venciere, daré á comer del maná escondido, le daré una piedrecita blanca, en la piedrecita un nombre nuevo escrito, el cual ninguno conoce sino aquel que lo recibe”

— Apocalipsis 2:17

“Al cual allegándoos, piedra viva, reprobada cierto de los hombres, empero elegida de Dios, preciosa”

— 1 Pedro 2:4

“Por tanto, el Señor Jehová dice así: He aquí que yo fundo en Sión una piedra, piedra de fortaleza, de esquina, de precio, de cimiento estable: el que creyere, no se apresure”

— Isaías 28:16

“Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, gente santa, pueblo adquirido, para que anunciéis las virtudes de aquel que os ha llamado de las tinieblas á su luz admirable”

— 1 Pedro 2:9

“Si no fuere tan presto, para que sepas cómo te conviene conversar en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios vivo, columna apoyo de la verdad”

— 1 Timoteo 3:15

“Edificados sobre el fundamento de los apóstoles profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo”

— Efesios 2:20

“Jesús le dice: Yo soy el camino, la verdad, la vida: nadie viene al Padre, sino por mí”

— Juan 14:6

“La piedra que desecharon los edificadores, Ha venido á ser cabeza del ángulo”

— Salmos 118:22

“Siria fué tu mercadera por la multitud de tus labores: con perlas, púrpura, vestidos bordados, linos finos, corales, rubíes, dió en tus ferias”

— Ezequiel 27:16

“Los hijos de Sión, preciados estimados más que el oro puro, ­Cómo son tenidos por vasos de barro, obra de manos de alfarero”

— Lamentaciones 4:2

“Siempre, de día de noche, andaba dando voces en los montes en los sepulcros, é hiriéndose con las piedras”

— Marcos 5:5

“Por cuanto todos pecaron, están distituídos de la gloria de Dios”

— Romanos 3:23

“Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando cayereis en diversas tentaciones”

— Santiago 1:2

“Él es la propiciación por nuestros pecados: no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo”

— 1 Juan 2:2

“Entonces volvieron á tomar piedras los Judíos para apedrearle”

— Juan 10:31

“Habéis oído cómo yo os he dicho: Voy, vengo á vosotros. Si me amaseis, ciertamente os gozaríais, porque he dicho que voy al Padre: porque el Padre mayor es que yo”

— Juan 14:28

“Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado de la muerte”

— Romanos 8:2

“Ningún siervo puede servir á dos señores; porque ó aborrecerá al uno amará al otro, ó se allegará al uno menospreciará al otro. No podéis servir á Dios á las riquezas”

— Lucas 16:13

“Oí una voz del cielo como ruido de muchas aguas, como sonido de un gran trueno: oí una voz de tañedores de arpas que tañían con sus arpas”

— Apocalipsis 14:2

“Porque yo Jehová, no me mudo; así vosotros, hijos de Jacob, no habéis sido consumidos”

— Malaquías 3:6

“De la manera que viste que del monte fué cortada una piedra, no con manos, la cual desmenuzó al hierro, al metal, al tiesto, á la plata, al oro; el gran Dios ha mostrado al rey lo que ha de acontecer en lo por venir: el sueño es verdadero, fiel su declaración”

— Daniel 2:45

“Sus Nazareos fueron blancos más que la nieve, más lustrosos que la leche. Su compostura más rubicunda que los rubíes, más bellos que el zafiro”

— Lamentaciones 4:7

“Tus ventanas pondré de piedras preciosas, tus puertas de piedras de carbunclo, todo tu término de piedras de buen gusto”

— Isaías 54:12

“Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento, no comencéis á decir en vosotros mismos: Tenemos á Abraham por padre: porque os digo que puede Dios, aun de estas piedras, levantar hijos á Abraham”

— Lucas 3:8

“El quinto, sardónica; el sexto, sardio; el séptimo, crisólito; el octavo, berilo; el nono, topacio; el décimo, crisopraso; el undécimo, jacinto; el duodécimo, amatista”

— Apocalipsis 21:20

“Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo”

— 1 Corintios 3:11

“El rey les dijo: He soñado un sueño, mi espíritu se ha perturbado por saber del sueño”

— Daniel 2:3

“Porque la Escritura dice: Todo aquel que en él creyere, no será avergonzado”

— Romanos 10:11

“AMADOS, no creáis á todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas son salidos en el mundo”

— 1 Juan 4:1

“El segundo es semejante á él: Amarás á tu prójimo como á ti mismo. No hay otro mandamiento mayor que éstos”

— Marcos 12:31

“Pobrecita, fatigada con tempestad, sin consuelo; he aquí que yo cimentaré tus piedras sobre carbunclo, sobre zafiros te fundaré”

— Isaías 54:11

“Los mercaderes de Seba de Raama fueron tus mercaderes: con lo principal de toda especiería, toda piedra preciosa, oro, dieron en tus ferias”

— Ezequiel 27:22

“Los fundamentos del muro de la ciudad estaban adornados de toda piedra preciosa. El primer fundamento era jaspe; el segundo, zafiro; el tercero, calcedonia; el cuarto, esmeralda”

— Apocalipsis 21:19

“Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual, sin engaño, para que por ella crezcáis en salud”

— 1 Pedro 2:2

“No penséis decir dentro de vosotros: á Abraham tenemos por padre: porque yo os digo, que puede Dios despertar hijos á Abraham aun de estas piedras”

— Mateo 3:9

“Vosotros seréis llamados sacerdotes de Jehová, ministros del Dios nuestro seréis dichos: comeréis las riquezas de las gentes, con su gloria seréis sublimes”

— Isaías 61:6

“Teniendo la claridad de Dios: su luz era semejante á una piedra preciosísima, como piedra de jaspe, resplandeciente como cristal”

— Apocalipsis 21:11

“Amarás pues al Señor tu Dios de todo tu corazón, de toda tu alma, de toda tu mente, de todas tus fuerzas; este es el principal mandamiento”

— Marcos 12:30

“Si alguno edificare sobre este fundamento oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, hojarasca”

— 1 Corintios 3:12

“Limpiará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; la muerte no será más; no habrá más llanto, ni clamor, ni dolor: porque las primeras cosas son pasadas”

— Apocalipsis 21:4

“He aquí que tú eres más sabio que Daniel; no hay secreto que te sea oculto”

— Ezequiel 28:3

“Estuve mirando hasta que fueron puestas sillas: un Anciano de grande edad se sentó, cuyo vestido era blanco como la nieve, el pelo de su cabeza como lana limpia; su silla llama de fuego, sus ruedas fuego ardiente”

— Daniel 7:9

“Bienaventurado santo el que tiene parte en la primera resurrección; la segunda muerte no tiene potestad en éstos; antes serán sacerdotes de Dios de Cristo, reinarán con él mil años”

— Apocalipsis 20:6

“Sé vigilante confirma las otras cosas que están para morir; porque no he hallado tus obras perfectas delante de Dios”

— Apocalipsis 3:2

“El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice á las iglesias. Al que venciere, daré á comer del árbol de la vida, el cual está en medio del paraíso de Dios”

— Apocalipsis 2:7

“A Timoteo, amado hijo: Gracia, misericordia, paz de Dios el Padre de Jesucristo nuestro Señor”

— 2 Timoteo 1:2

“¿quién podrá sufrir el tiempo de su venida? ó ¿quién podrá estar cuando él se mostrará? Porque él es como fuego purificador, como jabón de lavadores”

— Malaquías 3:2

“Cuando pues haces limosna, no hagas tocar trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas en las plazas, para ser estimados de los hombres: de cierto os digo, que ya tienen su recompensa”

— Mateo 6:2

“A los cinco del mes, que fué en el quinto año de la transmigración del rey Joachîn”

— Ezequiel 1:2

“LA revelación de Jesucristo, que Dios le dió, para manifestar á sus siervos las cosas que deben suceder presto; la declaró, enviándo la por su ángel á Juan su siervo”

— Apocalipsis 1:1

“ASI que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable á Dios, que es vuestro racional culto”

— Romanos 12:1

“Él respondiendo, les dijo: Os digo que si éstos callaren, las piedras clamarán”

— Lucas 19:40

“Oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, morará con ellos; ellos serán su pueblo, el mismo Dios será su Dios con ellos”

— Apocalipsis 21:3

“¿Ni aun esta Escritura habéis leído: La piedra que desecharon los que edificaban, Esta es puesta por cabeza de esquina”

— Marcos 12:10

“Tú, hijo del hombre, levanta endechas sobre Tiro”

— Ezequiel 27:2

“Las cinco de ellas eran prudentes, las cinco fatuas”

— Mateo 25:2

“Sucedió que por la liviandad de su fornicación la tierra fué contaminada, adulteró con la piedra con el leño”

— Jeremías 3:9

“Nos has hecho para nuestro Dios reyes sacerdotes, reinaremos sobre la tierra”

— Apocalipsis 5:10

“Para que sean confortados sus corazones, unidos en amor, en todas riquezas de cumplido entendimiento para conocer el misterio de Dios, del Padre, de Cristo”

— Colosenses 2:2

“Respondió Jesús, díjole: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere otra vez, no puede ver el reino de Dios”

— Juan 3:3

“El cual ha dado testimonio de la palabra de Dios, del testimonio de Jesucristo, de todas las cosas que ha visto”

— Apocalipsis 1:2

“Prendió al dragón, aquella serpiente antigua, que es el Diablo Satanás, le ató por mil años”

— Apocalipsis 20:2

“Habló Daniel dijo: Veía yo en mi visión de noche, he aquí que los cuatro vientos del cielo combatían en la gran mar”

— Daniel 7:2

“Porque nosotros, coadjutores somos de Dios; vosotros labranza de Dios sois, edificio de Dios sois”

— 1 Corintios 3:9

“Respondiendo él, les dijo: ¿Veis todo esto? de cierto os digo, que no será dejada aquí piedra sobre piedra, que no sea destruída”

— Mateo 24:2

“Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, no de mal, para daros el fin que esperáis”

— Jeremías 29:11

“En la casa de mi Padre muchas moradas hay: de otra manera os lo hubiera dicho: voy, pues, á preparar lugar para vosotros”

— Juan 14:2

“Mucho en todas maneras. Lo primero ciertamente, que la palabra de Dios les ha sido confiada”

— Romanos 3:2

“Bienaventurado el que lee, los que oyen las palabras de esta profecía, guardan las cosas en ella escritas: porque el tiempo está cerca”

— Apocalipsis 1:3

“En Edén, en el huerto de Dios estuviste: toda piedra preciosa fué tu vestidura; el sardio, topacio, diamante, crisólito, onique, berilo, el zafiro, carbunclo, esmeralda, oro, los primores de tus tamboriles pífanos estuvieron apercibidos para ti en el día de tu creación”

— Ezequiel 28:13

“Yo sé tus obras, tu trabajo paciencia; que tú no puedes sufrir los malos, has probado á los que se dicen ser apóstoles, no lo son, los has hallado mentirosos”

— Apocalipsis 2:2

“Este vino á Jesús de noche, díjole: Rabbí, sabemos que has venido de Dios por maestro; porque nadie puede hacer estas señales que tú haces, si no fuere Dios con él”

— Juan 3:2

“Yo Juan vi la santa ciudad, Jerusalem nueva, que descendía del cielo, de Dios, dispuesta como una esposa ataviada para su marido”

— Apocalipsis 21:2

“Así que, ofrezcamos por medio de él á Dios siempre sacrificio de alabanza, es á saber, fruto de labios que confiesen á su nombre”

— Hebreos 13:15

“Piedra de tropiezo, roca de escándalo á aquellos que tropiezan en la palabra, siendo desobedientes; para lo cual fueron también ordenados”

— 1 Pedro 2:8

“Nos ha hecho reyes sacerdotes para Dios su Padre; á él sea gloria é imperio para siempre jamás. Amén”

— Apocalipsis 1:6

“Ella es pues honor á vosotros que creéis: mas para los desobedientes, La piedra que los edificadores reprobaron, Esta fué hecha la cabeza del ángulo”

— 1 Pedro 2:7

“SALIENDO del templo, le dice uno de sus discípulos: Maestro, mira qué piedras, qué edificios”

— Marcos 13:1

“Por lo cual también contiene la Escritura: He aquí, pongo en Sión la principal piedra del ángulo, escogida, preciosa; el que creyere en ella, no será confundido”

— 1 Pedro 2:6