Bienvenido a nuestro sitio dedicado a explorar los diferentes versículos y enseñanzas de la Biblia sobre Nacido muerto. Este es uno de los muchos mensajes bíblicos que desempeñan un papel importante en nuestras vidas.
Aquí encontrarás una colección de versículos bíblicos y pasajes relacionados que abordan directamente el tema de Nacido muerto, así como una variedad de textos asociados que profundizan en las diversas complejidades y matices de este tema.
Esperamos que encuentres la información aquí valiosa e inspiradora. Ahora, adentrémonos en los versículos de la Biblia para aprender más.
“Mas cuando plugo á Dios, que me apartó desde el vientre de mi madre, me llamó por su gracia”
— Gálatas 1:15
“LA revelación de Jesucristo, que Dios le dió, para manifestar á sus siervos las cosas que deben suceder presto; la declaró, enviándo la por su ángel á Juan su siervo”
— Apocalipsis 1:1
“Mirad no tengáis en poco á alguno de estos pequeños; porque os digo que sus ángeles en los cielos ven siempre la faz de mi Padre que está en los cielos”
— Mateo 18:10
“Jesús dijo: Dejad á los niños, no les impidáis de venir á mí; porque de los tales es el reino de los cielos”
— Mateo 19:14
“He aquí, heredad de Jehová son los hijos: Cosa de estima el fruto del vientre”
— Salmos 127:3
“Antes que te formase en el vientre te conocí, antes que salieses de la matriz te santifiqué, te dí por profeta á las gentes”
— Jeremías 1:5
“Este vino á Jesús de noche, díjole: Rabbí, sabemos que has venido de Dios por maestro; porque nadie puede hacer estas señales que tú haces, si no fuere Dios con él”
— Juan 3:2
“Porque somos hechura suya, criados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó para que anduviésemos en ellas”
— Efesios 2:10
“Instruye al niño en su carrera: Aun cuando fuere viejo no se apartará de ella”
— Proverbios 22:6
“Porque tú poseiste mis riñones; Cubrísteme en el vientre de mi madre”
— Salmos 139:13
“Como tú no sabes cuál es el camino del viento, ó como se crían los huesos en el vientre de la mujer preñada, así ignoras la obra de Dios, el cual hace todas las cosas”
— Eclesiastés 11:5
“En su mano está el alma de todo viviente, el espíritu de toda carne humana”
— Job 12:10
“Si confesamos nuestros pecados, él es fiel justo para que nos perdone nuestros pecados, nos limpie de toda maldad”
— 1 Juan 1:9
“EN el principio crió Dios los cielos la tierra”
— Génesis 1:1
“Mas á los temerosos é incrédulos, á los abominables homicidas, á los fornicarios hechiceros, á los idólatras, á todos los mentirosos, su parte será en el lago ardiendo con fuego azufre, que es la muerte segunda”
— Apocalipsis 21:8
“Si comprares siervo hebreo, seis años servirá; mas al séptimo saldrá horro de balde”
— Éxodo 21:2
“Porque somos sepultados juntamente con él á muerte por el bautismo; para que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en novedad de vida”
— Romanos 6:4
“Mas ahora que ya es muerto, ¿para qué tengo de ayunar? ¿podré yo hacerle volver? Yo voy á él, mas él no volverá á mí”
— 2 Samuel 12:23
“No te des priesa con tu boca, ni tu corazón se apresure á proferir palabra delante de Dios; porque Dios está en el cielo, tú sobre la tierra: por tanto, sean pocas tus palabras”
— Eclesiastés 5:2
“Porque he aquí, como llegó la voz de tu salutación á mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre”
— Lucas 1:44
“(Porque la vida fué manifestada, vimos, testificamos, os anunciamos aquella vida eterna, la cual estaba con el Padre, nos ha aparecido;)”
— 1 Juan 1:2
“Entre los cuales todos nosotros también vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne de los pensamientos; éramos por naturaleza hijos de ira, también como los demás”
— Efesios 2:3
“Como nos lo enseñaron los que desde el principio lo vieron por sus ojos, fueron ministros de la palabra”
— Lucas 1:2
“La tierra estaba desordenada vacía, las tinieblas estaban sobre la haz del abismo, el Espíritu de Dios se movía sobre la haz de las aguas”
— Génesis 1:2
“Aunque no haya visto el sol, ni conocido nada, más reposo tiene éste que aquél”
— Eclesiastés 6:5
“Todos tus hijos serán enseñados de Jehová; multiplicará la paz de tus hijos”
— Isaías 54:13
“Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo, que hoy estarás conmigo en el paraíso”
— Lucas 23:43
“Comenzaron á acusarle, diciendo: A éste hemos hallado que pervierte la nación, que veda dar tributo á César, diciendo que él es el Cristo, el rey”
— Lucas 23:2
“En la casa de mi Padre muchas moradas hay: de otra manera os lo hubiera dicho: voy, pues, á preparar lugar para vosotros”
— Juan 14:2
“Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando cayereis en diversas tentaciones”
— Santiago 1:2
“O ¿por qué no fuí escondido como aborto, Como los pequeñitos que nunca vieron luz?”
— Job 3:16
“El cual ha dado testimonio de la palabra de Dios, del testimonio de Jesucristo, de todas las cosas que ha visto”
— Apocalipsis 1:2
“Dijo Dios: Hagamos al hombre á nuestra imagen, conforme á nuestra semejanza; señoree en los peces de la mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, en todo animal que anda arrastrando sobre la tierra”
— Génesis 1:26
“Pasen ellos como el caracol que se deslí: Como el abortivo de mujer, no vean el sol”
— Salmos 58:8
“Si algunos riñeren, é hiriesen á mujer preñada, ésta abortare, pero sin haber muerte, será penado conforme á lo que le impusiere el marido de la mujer juzgaren los árbitros”
— Éxodo 21:22
“Acabó Dios en el día séptimo su obra que hizo, reposó el día séptimo de toda su obra que había hecho”
— Génesis 2:2
“De cierto os digo, que el que no recibiere el reino de Dios como un niño, no entrará en él”
— Marcos 10:15
“De la boca de los chiquitos de los que maman, fundaste la fortaleza, A causa de tus enemigos, Para hacer cesar al enemigo, al que se venga”
— Salmos 8:2
“Si subiere á los cielos, allí estás tú: si en abismo hiciere mi estrado, he aquí allí tú estás”
— Salmos 139:8
“Por el cual también tenemos entrada por la fe á esta gracia en la cual estamos firmes, nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios”
— Romanos 5:2
“MIRAD cuál amor nos ha dado el Padre, que seamos llamados hijos de Dios: por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoce á él”
— 1 Juan 3:1
“¿O no sabéis que todos los que somos bautizados en Cristo Jesús, somos bautizados en su muerte?”
— Romanos 6:3
“Cualquiera que hace pecado, traspasa también la ley; pues el pecado es transgresión de la ley”
— 1 Juan 3:4
“Por este niño oraba, Jehová me dió lo que le pedí”
— 1 Samuel 1:27
“Formó, pues, Jehová Dios al hombre del polvo de la tierra, alentó en su nariz soplo de vida; fué el hombre en alma viviente”
— Génesis 2:7
“Elegidos según la presciencia de Dios Padre en santificación del Espíritu, para obedecer ser rociados con la sangre de Jesucristo: Gracia paz os sea multiplicada”
— 1 Pedro 1:2
“Porque ¿qué más tiene el sabio que el necio? ¿qué más tiene el pobre que supo caminar entre los vivos?”
— Eclesiastés 6:8
“Lo que es nacido de la carne, carne es; lo que es nacido del Espíritu, espíritu es”
— Juan 3:6
“Tendrás gozo alegría, muchos se gozarán de su nacimiento”
— Lucas 1:14
“La mujer cuando pare, tiene dolor, porque es venida su hora; mas después que ha parido un niño, ya no se acuerda de la angustia, por el gozo de que haya nacido un hombre en el mundo”
— Juan 16:21
“Vosotros, padres, no provoquéis á ira á vuestros hijos; sino fhhijos; sino fh amonestación del Señor”
— Efesios 6:4
“Toda buena dádiva todo don perfecto es de lo alto, que desciende del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación”
— Santiago 1:17
“Así, no es la voluntad de vuestro Padre que está en los cielos, que se pierda uno de estos pequeños”
— Mateo 18:14
“Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, no de mal, para daros el fin que esperáis”
— Jeremías 29:11
“OIDME, islas, escuchad, pueblos lejanos: Jehová me llamó desde el vientre; desde las entrañas de mi madre tuvo mi nombre en memoria”
— Isaías 49:1
“Respondió Jesús, díjole: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere otra vez, no puede ver el reino de Dios”
— Juan 3:3
“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado á su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”
— Juan 3:16