78+Versículos de la Biblia Esperando en el Señor

“Aguarda á Jehová; Esfuérzate, aliéntese tu corazón: Sí, espera á Jehová”

— Salmos 27:14

“Calla á Jehová, espera en él: No te alteres con motivo del que prospera en su camino, Por el hombre que hace maldades”

— Salmos 37:7

“Empero Jehová esperará para tener piedad de vosotros, por tanto será ensalzado teniendo de vosotros misericordia: porque Jehová es Dios de juicio: bienaventurados todos los que le esperan”

— Isaías 30:18

“Alma mía, en Dios solamente reposa; Porque de él es mi esperanza”

— Salmos 62:5

“Mas los que esperan á Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán las alas como águilas, correrán, no se cansarán, caminarán, no se fatigarán”

— Isaías 40:31

“Esperé yo á Jehová, esperó mi alma; En su palabra he esperado”

— Salmos 130:5

“Tú pues, conviértete á tu Dios: guarda misericordia juicio, en tu Dios espera siempre”

— Oseas 12:6

“Esperaré pues á Jehová, el cual escondió su rostro de la casa de Jacob, á él aguardaré”

— Isaías 8:17

“Ni nunca oyeron, ni oídos percibieron, ni ojo ha visto Dios fuera de ti, que hiciese por el que en él espera”

— Isaías 64:4

“Yo empero á Jehová esperaré, esperaré al Dios de mi salud: el Dios mío me oirá”

— Miqueas 7:7

“Al Músico principal: Salmo de David. RESIGNADAMENTE esperé á Jehová, inclinóse á mí, oyó mi clamor”

— Salmos 40:1

“Sabemos que á los que á Dios aman, todas las cosas les ayudan á bien, es á saber, á los que conforme al propósito son llamados”

— Romanos 8:28

“Porque nosotros por el Espíritu esperamos la esperanza de la justicia por la fe”

— Gálatas 5:5

“Si el hombre muriere, ¿volverá á vivir? Todos los días de mi edad esperaré, Hasta que venga mi mutación”

— Job 14:14

“Se dirá en aquel día: He aquí este es nuestro Dios, le hemos esperado, nos salvará; éste es Jehová á quien hemos esperado, nos gozaremos nos alegraremos en su salud”

— Isaías 25:9

“Por nada estéis afanosos; sino sean notorias vuestras peticiones delante de Dios en toda oración ruego, con hacimiento de gracias”

— Filipenses 4:6

“De tal manera que nada os falte en ningún don, esperando la manifestación de nuestro Señor Jesucristo”

— 1 Corintios 1:7

“Fueron dadas á la mujer dos alas de grande águila, para que de la presencia de la serpiente volase al desierto, á su lugar, donde es mantenida por un tiempo, tiempos, la mitad de un tiempo”

— Apocalipsis 12:14

“ES pues la fe la sustancia de las cosas que se esperan, la demostración de las cosas que no se ven”

— Hebreos 11:1

“José de Arimatea, senador noble, que también esperaba el reino de Dios, vino, osadamente entró á Pilato, pidió el cuerpo de Jesús”

— Marcos 15:43

“Estad quietos, conoced que yo soy Dios: Ensalzado he de ser entre las gentes, ensalzado seré en la tierra”

— Salmos 46:10

“Luego la fe es por el oir; el oir por la palabra de Dios”

— Romanos 10:17

“Estando juntos, les mandó que no se fuesen de Jerusalem, sino que esperasen la promesa del Padre, que oísteis, dijo, de mí”

— Hechos 1:4

“Así que, no juzguéis nada antes de tiempo, hasta que venga el Señor, el cual también aclarará lo oculto de las tinieblas, manifestará los intentos de los corazones: entonces cada uno tendrá de Dios la alabanza”

— 1 Corintios 4:5

“Á Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos ó entendemos, por la potencia que obra en nosotros”

— Efesios 3:20

“Cántico gradual. DE los profundos, oh Jehová, á ti clamo”

— Salmos 130:1

“Mas confiamos, más quisiéramos partir del cuerpo, estar presentes al Señor”

— 2 Corintios 5:8

“Integridad rectitud me guarden; Porque en ti he esperado”

— Salmos 25:21

“No digas, yo me vengaré; Espera á Jehová, él te salvará”

— Proverbios 20:22

“Desfallece mi alma por tu salud, Esperando en tu palabra”

— Salmos 119:81

“Empero si lo que no vemos esperamos, por paciencia esperamos”

— Romanos 8:25

“Tened también vosotros paciencia; confirmad vuestros corazones: porque la venida del Señor se acerca”

— Santiago 5:8

“La caridad es sufrida, es benigna; la caridad no tiene envidia, la caridad no hace sinrazón, no se ensancha”

— 1 Corintios 13:4

“El Señor no tarda su promesa, como algunos la tienen por tardanza; sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento”

— 2 Pedro 3:9

“Así, esperando con largura de ánimo, alcanzó la promesa”

— Hebreos 6:15

“Cercana está mi justicia, salido ha mi salud, mis brazos juzgarán á los pueblos: á mí esperarán las islas, en mi brazo pondrán su esperanza”

— Isaías 51:5

“Ciertamente ninguno de cuantos en ti esperan será confundido: Serán avergonzados los que se rebelan sin causa”

— Salmos 25:3

“Porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo”

— Romanos 10:13

“He aquí, había un hombre en Jerusalem, llamado Simeón, este hombre, justo pío, esperaba la consolación de Israel: el Espíritu Santo era sobre él”

— Lucas 2:25

“Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, no de mal, para daros el fin que esperáis”

— Jeremías 29:11

“Los ojos de todos esperan en ti, tú les das su comida en su tiempo”

— Salmos 145:15

“El Señor enderece vuestros corazones en el amor de Dios, en la paciencia de Cristo”

— 2 Tesalonicenses 3:5

“Ahora pues, ¿por qué te detienes? Levántate, bautízate, lava tus pecados, invocando su nombre”

— Hechos 22:16

“Lámpara es á mis pies tu palabra, lumbrera á mi camino”

— Salmos 119:105

“Bienaventurado el varón que sufre la tentación; porque cuando fuere probado, recibirá la corona de vida, que Dios ha prometido á los que le aman”

— Santiago 1:12

“Porque la paciencia os es necesaria; para que, habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa”

— Hebreos 10:36

“Mi alma espera á Jehová Más que los centinelas á la mañana. Más que los vigilantes á la mañana”

— Salmos 130:6

“Ahora, Señor, ¿qué esperaré? Mi esperanza en ti está”

— Salmos 39:7

“Gozosos en la esperanza; sufridos en la tribulación; constantes en la oración”

— Romanos 12:12

“Te alabaré para siempre por lo que has hecho: esperaré en tu nombre, porque es bueno, delante de tus santos”

— Salmos 52:9

“Esperar á su Hijo de los cielos, al cual resucitó de los muertos; á Jesús, el cual nos libró de la ira que ha de venir”

— 1 Tesalonicenses 1:10

“He aquí, tenemos por bienaventurados á los que sufren. Habéis oído la paciencia de Job, habéis visto el fin del Señor, que el Señor es muy misericordioso piadoso”

— Santiago 5:11

“No sean avergonzados por mi causa los que te esperan, oh Señor Jehová de los ejércitos; No sean confusos por mí los que te buscan, oh Dios de Israel”

— Salmos 69:6

“Pues, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor. Mirad cómo el labrador espera el precioso fruto de la tierra, aguardando con paciencia, hasta que reciba la lluvia temprana tardía”

— Santiago 5:7

“POR tanto nosotros también, teniendo en derredor nuestro una tan grande nube de testigos, dejando todo el peso del pecado que nos rodea, corramos con paciencia la carrera que nos es propuesta”

— Hebreos 12:1

“Oh Jehová, ten misericordia de nosotros, á ti hemos esperado: tú, brazo de ellos en la mañana, sé también nuestra salud en tiempo de la tribulación”

— Isaías 33:2

“Mas buscad primeramente el reino de Dios su justicia, todas estas cosas os serán añadidas”

— Mateo 6:33

“Corroborados de toda fortaleza, conforme á la potencia de su gloria, para toda tolerancia largura de ánimo con gozo”

— Colosenses 1:11

“Hubiera yo desmayado, si no creyese que tengo de ver la bondad de Jehová En la tierra de los vivientes”

— Salmos 27:13

“¿Hay entre las vanidades de las gentes quien haga llover? ¿darán los cielos lluvias? ¿No eres tú, Jehová, nuestro Dios? en ti pues esperamos; pues tú hiciste todas estas cosas”

— Jeremías 14:22

“Lleguémonos pues confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia, hallar gracia para el oportuno socorro”

— Hebreos 4:16

“Mas tenga la paciencia perfecta su obra, para que seáis perfectos cabales, sin faltar en alguna cosa”

— Santiago 1:4

“Por la fe Noé, habiendo recibido respuesta de cosas que aun no se veían, con temor aparejó el arca en que su casa se salvase: por la cual fe condenó al mundo, fué hecho heredero de la justicia que es por la fe”

— Hebreos 11:7

“Nuestra alma esperó á Jehová; Nuestra ayuda nuestro escudo es él”

— Salmos 33:20

“Esforzaos todos vosotros los que esperáis en Jehová, tome vuestro corazón aliento”

— Salmos 31:24

“LA revelación de Jesucristo, que Dios le dió, para manifestar á sus siervos las cosas que deben suceder presto; la declaró, enviándo la por su ángel á Juan su siervo”

— Apocalipsis 1:1

“Apresuráronse, olvidáronse de sus obras; No esperaron en su consejo”

— Salmos 106:13

“Empero sin fe es imposible agradar á Dios; porque es menester que el que á Dios se allega, crea que le hay, que es galardonador de los que le buscan”

— Hebreos 11:6

“Porque como hierba serán presto cortados, decaerán como verdor de renuevo”

— Salmos 37:2

“Esperando aquella esperanza bienaventurada, la manifestación gloriosa del gran Dios Salvador nuestro Jesucristo”

— Tito 2:13

“Aunque la visión tardará aún por tiempo, mas al fin hablará, no mentirá: aunque se tardare, espéralo, que sin duda vendrá; no tardará”

— Habacuc 2:3

“Bueno es Jehová á los que en él esperan, al alma que le buscare”

— Lamentaciones 3:25

“Muy amados, ahora somos hijos de Dios, aun no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él apareciere, seremos semejantes á él, porque le veremos como él es”

— 1 Juan 3:2

“Encamíname en tu verdad, enséñame; Porque tú eres el Dios de mi salud: En ti he esperado todo el día”

— Salmos 25:5

“No nos cansemos, pues, de hacer bien; que á su tiempo segaremos, si no hubiéremos desmayado”

— Gálatas 6:9

“Porque los malignos serán talados, Mas los que esperan en Jehová, ellos heredarán la tierra”

— Salmos 37:9

“Mas nuestra vivienda es en los cielos; de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo”

— Filipenses 3:20

“Espera en Jehová, guarda su camino, él te ensalzará para heredar la tierra: Cuando serán talados los pecadores, lo verás”

— Salmos 37:34

“Con Cristo estoy juntamente crucificado, vivo, no ya yo, mas vive Cristo en mí: lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó, se entregó á sí mismo por mí”

— Gálatas 2:20