Bienvenido a nuestro sitio dedicado a explorar los diferentes versículos y enseñanzas de la Biblia sobre Rabinos. Este es uno de los muchos mensajes bíblicos que desempeñan un papel importante en nuestras vidas.
Aquí encontrarás una colección de versículos bíblicos y pasajes relacionados que abordan directamente el tema de Rabinos, así como una variedad de textos asociados que profundizan en las diversas complejidades y matices de este tema.
Esperamos que encuentres la información aquí valiosa e inspiradora. Ahora, adentrémonos en los versículos de la Biblia para aprender más.
“Volviéndose Jesús, viéndolos seguir le, díceles: ¿Qué buscáis? ellos le dijeron: Rabbí (que declarado quiere decir Maestro) ¿dónde moras?”
— Juan 1:38
“Luego que llegó á Jesús, dijo: Salve, Maestro. le besó”
— Mateo 26:49
“Las salutaciones en las plazas, ser llamados de los hombres Rabbí, Rabbí”
— Mateo 23:7
“Mas vosotros, no queráis ser llamados Rabbí; porque uno es vuestro Maestro, el Cristo; todos vosotros sois hermanos”
— Mateo 23:8
“Entonces respondiendo Judas, que le entregaba, dijo. ¿Soy yo, Maestro? Dícele: Tú lo has dicho”
— Mateo 26:25
“Respondió Natanael, díjole: Rabbí, tú eres el Hijo de Dios; tú eres el Rey de Israel”
— Juan 1:49
“Vinieron á Juan, dijéronle: Rabbí, el que estaba contigo de la otra parte del Jordán, del cual tú diste testimonio, he aquí bautiza, todos vienen á él”
— Juan 3:26
“Como vino, se acercó luego á él, le dice: Maestro, Maestro. le besó”
— Marcos 14:45
“Entonces respondiendo Pedro, dice á Jesús: Maestro, bien será que nos quedemos aquí, hagamos tres pabellones: para ti uno, para Moisés otro, para Elías otro”
— Marcos 9:5
“Entonces Pedro acordándose, le dice: Maestro, he aquí la higuera que maldijiste, se ha secado”
— Marcos 11:21

“Este vino á Jesús de noche, díjole: Rabbí, sabemos que has venido de Dios por maestro; porque nadie puede hacer estas señales que tú haces, si no fuere Dios con él”
— Juan 3:2
“Junté conmigo por testigos fieles á Urías sacerdote, á Zacarías hijo de Jeberechîas”
— Isaías 8:2
“Empero estos no comeréis de los que rumian, ó tienen uña hendida: camello, liebre, conejo, porque rumian, mas no tienen uña hendida, os serán inmundos”
— Deuteronomio 14:7
“Les dijo: Vosotros sabéis que es abominable á un varón Judío juntarse ó llegarse á extranjero; mas me ha mostrado Dios que á ningún hombre llame común ó inmundo”
— Hechos 10:28
“Respondiendo Jesús, le dice: ¿Qué quieres que te haga? el ciego le dice: Maestro, que cobre la vista”
— Marcos 10:51

“No temas, que yo soy contigo; no desmayes, que yo soy tu Dios que te esfuerzo: siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”
— Isaías 41:10

“Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, no de mal, para daros el fin que esperáis”
— Jeremías 29:11
“A Timoteo, verdadero hijo en la fe: Gracia, misericordia paz de Dios nuestro Padre, de Cristo Jesús nuestro Señor”
— 1 Timoteo 1:2

“Porque con el juicio con que juzgáis, seréis juzgados; con la medida con que medís, os volverán á medir”
— Mateo 7:2
“También el conejo, porque rumia, mas no tiene pezuña, tendréislo por inmundo”
— Levítico 11:5

“Pedro les dice: Arrepentíos, bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; recibiréis el don del Espíritu Santo”
— Hechos 2:38

“De cierto os digo que todo lo que ligareis en la tierra, será ligado en el cielo; todo lo que desatareis en la tierra, será desatado en el cielo”
— Mateo 18:18
“Estos son los animales que comeréis: el buey, la oveja, la cabra”
— Deuteronomio 14:4
“Asimismo la liebre, porque rumia, mas no tiene pezuña, tendréisla por inmunda”
— Levítico 11:6

“EN el principio crió Dios los cielos la tierra”
— Génesis 1:1
“Enlazado eres con las palabras de tu boca, preso con las razones de tu boca”
— Proverbios 6:2
“ENTONCES habló Jesús á las gentes á sus discípulos”
— Mateo 23:1

“Dijo Dios: Hagamos al hombre á nuestra imagen, conforme á nuestra semejanza; señoree en los peces de la mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, en todo animal que anda arrastrando sobre la tierra”
— Génesis 1:26
“De entre los animales, todo el de pezuña, que tiene las pezuñas hendidas, que rumia, éste comeréis”
— Levítico 11:3

“Porque ninguna cosa es imposible para Dios”
— Lucas 1:37
“Mirad á Abraham vuestro padre, á Sara que os parió; porque solo lo llamé, bendíjelo, multipliquélo”
— Isaías 51:2
“El ciervo, el corzo, el búfalo, el cabrío salvaje, el unicornio, buey salvaje, cabra montés”
— Deuteronomio 14:5

“Así que, todas las cosas que quisierais que los hombres hiciesen con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esta es la ley los profetas”
— Mateo 7:12

“Á ti daré las llaves del reino de los cielos; todo lo que ligares en la tierra será ligado en los cielos; todo lo que desatares en la tierra será desatado en los cielos”
— Mateo 16:19

“Abriendo su boca, les enseñaba, diciendo”
— Mateo 5:2
“Dijo Dios: Sea la luz: fué la luz”
— Génesis 1:3
“Dícenle los discípulos: Rabbí, ahora procuraban los Judíos apedrearte, ¿otra vez vas allá?”
— Juan 11:8

“EN el principio era el Verbo, el Verbo era con Dios, el Verbo era Dios”
— Juan 1:1
“Dícele Jesús: María! Volviéndose ella, dícele: Rabboni! que quiere decir, Maestro”
— Juan 20:16
“Entre tanto los discípulos le rogaban, diciendo: Rabbí, come”
— Juan 4:31
“Preguntáronle sus discípulos, diciendo: Rabbí, ¿quién pecó, éste ó sus padres, para que naciese ciego?”
— Juan 9:2

“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado á su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”
— Juan 3:16

“Mas los que esperan á Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán las alas como águilas, correrán, no se cansarán, caminarán, no se fatigarán”
— Isaías 40:31

“Toda Escritura es inspirada divinamente útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instituir en justicia”
— 2 Timoteo 3:16

“Jesús le dice: Yo soy el camino, la verdad, la vida: nadie viene al Padre, sino por mí”
— Juan 14:6
“Hallándole de la otra parte de la mar, dijéronle: Rabbí, ¿cuándo llegaste acá?”
— Juan 6:25