Bienvenido a nuestro sitio dedicado a explorar los diferentes versículos y enseñanzas de la Biblia sobre Gran médico. Este es uno de los muchos mensajes bíblicos que desempeñan un papel importante en nuestras vidas.
Aquí encontrarás una colección de versículos bíblicos y pasajes relacionados que abordan directamente el tema de Gran médico, así como una variedad de textos asociados que profundizan en las diversas complejidades y matices de este tema.
Esperamos que encuentres la información aquí valiosa e inspiradora. Ahora, adentrémonos en los versículos de la Biblia para aprender más.
“Oyéndolo Jesús, le dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos”
— Mateo 9:12
“La paz os dejo, mi paz os doy: no como el mundo la da, yo os la doy. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo”
— Juan 14:27
“Oyéndolo Jesús, les dice: Los sanos no tienen necesidad de médico, mas los que tienen mal. No he venido á llamar á los justos, sino á los pecadores”
— Marcos 2:17
“¿No hay bálsamo en Galaad? ¿no hay allí médico? ¿Por qué pues no hubo medicina para la hija de mi pueblo?”
— Jeremías 8:22
“Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no necesitan médico, sino los que están enfermos”
— Lucas 5:31
“Os saluda Lucas, el médico amado, Demas”
— Colosenses 4:14
“La oración de fe salvará al enfermo, el Señor lo levantará; si estuviere en pecados, le serán perdonados”
— Santiago 5:15
“Les dijo: Sin duda me diréis este refrán: Médico, cúrate á ti mismo: de tantas cosas que hemos oído haber sido hechas en Capernaum, haz también aquí en tu tierra”
— Lucas 4:23
“Limpiará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; la muerte no será más; no habrá más llanto, ni clamor, ni dolor: porque las primeras cosas son pasadas”
— Apocalipsis 21:4
“El cual mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros siendo muertos á los pecados, vivamos á la justicia: por la herida del cual habéis sido sanados”
— 1 Pedro 2:24
“Venid á mí todos los que estáis trabajados cargados, que yo os haré descansar”
— Mateo 11:28
“Mas Dios encarece su caridad para con nosotros, porque siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros”
— Romanos 5:8
“Dijo: Si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, é hicieres lo recto delante de sus ojos, dieres oído á sus mandamientos, guardares todos sus estatutos, ninguna enfermedad de las que envié á los Egipcios te enviaré á ti; porque yo soy Jehová tu Sanador”
— Éxodo 15:26
“Porque vosotros sabéis bien, que el día del Señor vendrá así como ladrón de noche”
— 1 Tesalonicenses 5:2
“Estas cosas os he hablado, para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción: mas confiad, yo he vencido al mundo”
— Juan 16:33
“Porque el Hijo del hombre vino á buscar á salvar lo que se había perdido”
— Lucas 19:10
“Ved ahora que yo, yo soy, no hay dioses conmigo: Yo hago morir, yo hago vivir: Yo hiero, yo curo: no hay quien pueda librar de mi mano”
— Deuteronomio 32:39
“Había sufrido mucho de muchos médicos, había gastado todo lo que tenía, nada había aprovechado, antes le iba peor”
— Marcos 5:26
“Pasando Jesús de allí, vió á un hombre que estaba sentado al banco de los públicos tributos, el cual se llamaba Mateo; dícele: Sígueme. se levantó, le siguió”
— Mateo 9:9
“Porque él es el que hace la llaga, él la vendará: El hiere, sus manos curan”
— Job 5:18
“Saliendo Jesús, vió un gran gentío, tuvo compasión de ellos, sanó á los que de ellos había enfermos”
— Mateo 14:14
“Que ciertamente vosotros sois fraguadores de mentira; Sois todos vosotros médicos nulos”
— Job 13:4
“Porque el Hijo del hombre ha venido para salvar lo que se había perdido”
— Mateo 18:11
“Mas él herido fué por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados: el castigo de nuestra paz sobre él; por su llaga fuimos nosotros curados”
— Isaías 53:5
“Jesús le dice: Yo soy el camino, la verdad, la vida: nadie viene al Padre, sino por mí”
— Juan 14:6
“He aquí que yo le hago subir sanidad medicina; los curaré, les revelaré abundancia de paz de verdad”
— Jeremías 33:6
“Lucas solo está conmigo. Toma á Marcos, traéle contigo; porque me es útil para el ministerio”
— 2 Timoteo 4:11
“En ningún otro hay salud; porque no hay otro nombre debajo del cielo, dado á los hombres, en que podamos ser salvos”
— Hechos 4:12
“Por nada estéis afanosos; sino sean notorias vuestras peticiones delante de Dios en toda oración ruego, con hacimiento de gracias”
— Filipenses 4:6
“Rodeaba Jesús por todas las ciudades aldeas, enseñando en las sinagogas de ellos, predicando el evangelio del reino, sanando toda enfermedad todo achaque en el pueblo”
— Mateo 9:35
“No bebas de aquí adelante agua, sino usa de un poco de vino por causa del estómago, de tus continuas enfermedades”
— 1 Timoteo 5:23
“No os ha tomado tentación, sino humana: mas fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podeís llevar; antes dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis aguantar”
— 1 Corintios 10:13
“Confesaos vuestras faltas unos á otros, rogad los unos por los otros, para que seáis sanos; la oración del justo, obrando eficazmente, puede mucho”
— Santiago 5:16
“Los apóstoles daban testimonio de la resurrección del Señor Jesús con gran esfuerzo; gran gracia era en todos ellos”
— Hechos 4:33
“Por cuanto todos pecaron, están distituídos de la gloria de Dios”
— Romanos 3:23
“Mas á Jehová vuestro Dios serviréis, él bendecirá tu pan tus aguas; yo quitaré toda enfermedad de en medio de ti”
— Éxodo 23:25
“Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme á sus riquezas en gloria en Cristo Jesús”
— Filipenses 4:19
“Porque de su plenitud tomamos todos, gracia por gracia”
— Juan 1:16
“Sáname, oh Jehová, seré sano; sálvame, seré salvo: porque tú eres mi alabanza”
— Jeremías 17:14
“Jehová lo sustentará sobre el lecho del dolor: Mullirás toda su cama en su enfermedad”
— Salmos 41:3
“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado á su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”
— Juan 3:16
“De cierto os digo que todo lo que ligareis en la tierra, será ligado en el cielo; todo lo que desatareis en la tierra, será desatado en el cielo”
— Mateo 18:18
“Una mujer, que tenía flujo de sangre hacía ya doce años, la cual había gastado en médicos toda su hacienda, por ninguno había podido ser curada”
— Lucas 8:43
“EN el principio era el Verbo, el Verbo era con Dios, el Verbo era Dios”
— Juan 1:1
“Mas sabiendo lo Jesús, se apartó de allí: le siguieron muchas gentes, sanaba á todos”
— Mateo 12:15
“Porque la paga del pecado es muerte: mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro”
— Romanos 6:23
“Ten misericordia de mí, oh Jehová, porque yo estoy debilitado: Sáname, oh Jehová, porque mis huesos están conmovidos”
— Salmos 6:2
“Casi todo es purificado según la ley con sangre; sin derramamiento de sangre no se hace remisión”
— Hebreos 9:22
“Yo dije: Jehová, ten misericordia de mí; Sana mi alma, porque contra ti he pecado”
— Salmos 41:4
“Viendo esto los Fariseos, dijeron á sus discípulos: ¿Por qué come vuestro Maestro con los publicanos pecadores?”
— Mateo 9:11
“Hizo Leví gran banquete en su casa; había mucha compañía de publicanos de otros, los cuales estaban á la mesa con ellos”
— Lucas 5:29
“Los ojos de ellos fueron abiertos. Jesús les encargó rigurosamente, diciendo: Mirad que nadie lo sepa”
— Mateo 9:30
“Porque ninguna cosa es imposible para Dios”
— Lucas 1:37
“Mas á los temerosos é incrédulos, á los abominables homicidas, á los fornicarios hechiceros, á los idólatras, á todos los mentirosos, su parte será en el lago ardiendo con fuego azufre, que es la muerte segunda”
— Apocalipsis 21:8
“Él le dijo: Hija, tu fe te ha hecho salva: ve en paz, queda sana de tu azote”
— Marcos 5:34
“Rodeó Jesús toda Galilea, enseñando en las sinagogas de ellos, predicando el evangelio del reino, sanando toda enfermedad toda dolencia en el pueblo”
— Mateo 4:23
“El sana á los quebrantados de corazón, liga sus heridas”
— Salmos 147:3
“¿Está alguno enfermo entre vosotros? llame á los ancianos de la iglesia, oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor”
— Santiago 5:14
“Mucha confianza tengo de vosotros, tengo de vosotros mucha gloria; lleno estoy de consolación, sobreabundo de gozo en todas nuestras tribulaciones”
— 2 Corintios 7:4
“Mas yo haré venir sanidad para ti, te sanaré de tus heridas, dice Jehová; porque Arrojada te llamaron, diciendo: Esta es Sión, á la que nadie busca”
— Jeremías 30:17
“Habrá grandes terremotos, en varios lugares hambres pestilencias: habrá espantos grandes señales del cielo”
— Lucas 21:11
“El ladrón no viene sino para hurtar, matar, destruir: yo he venido para que tengan vida, para que la tengan en abundancia”
— Juan 10:10
“Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”
— Filipenses 4:13
“El año treinta nueve de su reinado enfermó Asa de los pies para arriba, en su enfermedad no buscó á Jehová, sino á los médicos”
— 2 Crónicas 16:12
“Echando toda vuestra solicitud en él, porque él tiene cuidado de vosotros”
— 1 Pedro 5:7
“Hablóles Jesús otra vez, diciendo: Yo soy la luz del mundo: el que me sigue, no andará en tinieblas, mas tendrá la lumbre de la vida”
— Juan 8:12
“Seguíale grande multitud, porque veían sus señales que hacía en los enfermos”
— Juan 6:2
“Mi Padre que me las dió, mayor que todos es nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre”
— Juan 10:29
“LA revelación de Jesucristo, que Dios le dió, para manifestar á sus siervos las cosas que deben suceder presto; la declaró, enviándo la por su ángel á Juan su siervo”
— Apocalipsis 1:1
“Estad quietos, conoced que yo soy Dios: Ensalzado he de ser entre las gentes, ensalzado seré en la tierra”
— Salmos 46:10
“El corazón alegre produce buena disposición: Mas el espíritu triste seca los huesos”
— Proverbios 17:22
“No temas, que yo soy contigo; no desmayes, que yo soy tu Dios que te esfuerzo: siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”
— Isaías 41:10
“Un ángel fuerte tomó una piedra como una grande piedra de molino, la echó en la mar, diciendo: Con tanto ímpetu será derribada Babilonia, aquella grande ciudad, nunca jamás será hallada”
— Apocalipsis 18:21
“Así también, la lengua es un miembro pequeño, se gloría de grandes cosas. He aquí, un pequeño fuego cuán grande bosque enciende”
— Santiago 3:5
“Llevóme en Espíritu á un grande alto monte, me mostró la grande ciudad santa de Jerusalem, que descendía del cielo de Dios”
— Apocalipsis 21:10
“En el medio de la plaza de ella, de la una de la otra parte del río, estaba el árbol de la vida, que lleva doce frutos, dando cada mes su fruto: las hojas del árbol eran para la sanidad de las naciones”
— Apocalipsis 22:2
“Andad pues, aprended qué cosa es: Misericordia quiero, no sacrificio: porque no he venido á llamar justos, sino pecadores á arrepentimiento”
— Mateo 9:13
“Porque la palabra de Dios es viva eficaz, más penetrante que toda espada de dos filos: que alcanza hasta partir el alma, aun el espíritu, las coyunturas tuétanos, discierne los pensamientos las intenciones del corazón”
— Hebreos 4:12